Conflicto entre Israel y palestinos: «El conflicto ha sido ignorado por el mundo», dice historiador

Después de unos años de relativa calma, Jerusalén Oriental se convirtió una vez más en el centro de tensiones entre israelíes y palestinos.

Lo que comenzó con disturbios contra los planes de desalojo de familias palestinas por parte del ejército israelí tomó la forma de enfrentamientos violentos que se multiplicaron en Gaza y varias ciudades israelíes. En la tarde del sábado (15/05), alrededor de 145 palestinos y 9 israelíes habían muerto en el conflicto.

La ONU advirtió que los acontecimientos podrían conducir a «una guerra a gran escala».

En una entrevista con BBC News Mundo, el servicio en español de la BBC, el historiador francés Vincent Lemire dijo que también piensa de esa manera.

Especialista en Oriente Medio, específicamente en Jerusalén, asegura que la ciudad vive un momento de violencia que no se ha visto desde la Segunda intifada, cuando, a principios de siglo, los palestinos se rebelaron contra la política de ocupación territorial emprendida por Israel.

Vincent Lemire es el autor del libro Jerusalén, Histoire d’une ville-monde (Jerusalén, historia de un mundo de ciudades,). Hablando directamente de la ciudad, analiza las razones que llevaron el lugar al puesto central de un conflicto que parece no tener solución.

Lea la entrevista a continuación.

BBC – ¿Cómo describe la actual escalada de violencia en Jerusalén?

Vincent Lemire: En términos de intensidad, no hemos visto este nivel de violencia desde la última guerra en Gaza en 2014. Y en términos de disturbios urbanos, eso no ha sucedido desde la Segunda intifada a principios de la década de 2000.

Esta intensa crisis comenzó en el Sheikh Jarrah (barrio palestino en Jerusalén Este) y en la explanada de las mezquitas, después de una movilización organizada por jóvenes palestinos que intentaban repeler a los agentes de seguridad israelíes en la Ciudad Vieja el lunes.

Pero a las 6 pm, la crisis cambió completamente cuando Hamas disparó una ráfaga de misiles e Israel respondió.

Por un lado tenemos a Jerusalén, que está bajo una movilización sin precedentes y sorprendente, por el otro tenemos Gaza, y luego tenemos las ciudades mixtas, donde hay muchos israelíes y palestinos. Hay levantamientos y enfrentamientos a gran escala en las comunidades.

Esto no se vio desde la Segunda intifada.

BBC – ¿la crisis actual se parece a la de 2014?

Lemire: En 2014, fue una guerra limitada a Gaza. Hamas estaba lanzando misiles mucho menos sofisticados de lo que vemos hoy, y el ejército israelí reaccionó.

Hubo pequeñas movilizaciones y ataques fuera de Gaza, pero Gaza fue el epicentro.

Hoy sucede lo contrario. Las movilizaciones comenzaron en Jerusalén en diferentes puntos, y Gaza finalmente se unió más tarde.

Gaza y Hamas estuvieron fuera de foco durante semanas, pero trataron de involucrarse y tuvieron éxito.

BBC – ¿Cuáles son los problemas actuales en Jerusalén Este y por qué la región se ha convertido de nuevo en el epicentro del conflicto?

Lemire: Jerusalén representa el regreso de los reprimidos. Yo estaba un poco fuera de la mesa de negociaciones del proceso de paz de Oslo (serie de acuerdos firmados entre Israel y Palestina en la década de 1990), porque era muy complicado y se pensaba que no tenía solución.

En Oslo se hablaba principalmente de refugiados, colonias, fronteras, etc.

Ahora que el proceso de Oslo ha terminado, que este paréntesis ha llegado oficialmente a su fin, Jerusalén vuelve al centro del conflicto y recupera esta posición central, como el corazón del nacionalismo palestino y también de la identidad judía.

BBC – la demografía de la ciudad también ha cambiado mucho en las últimas décadas…

Lemire: Totalmente. Hoy en día, el 40% de la población de Jerusalén es palestina. Hay 300 mil palestinos dentro de las fronteras del municipio de Jerusalén.

El porcentaje de palestinos en Jerusalén apenas alcanzó el 25% después de la Guerra de los Seis Días (en 1967).

Por lo tanto, vemos una curva demográfica ascendente en Jerusalén Oriental desde el lado palestino.

Esto juega un papel importante, porque actualmente la extrema derecha israelí está ganando terreno en Israel.

Al supremacista de extrema derecha le molesta ver cómo Jerusalén escapa a la soberanía israelí, que el 40% de la población de la ciudad es palestina y el 90% de la Ciudad Vieja es palestina. Crea tensiones.

Lo hemos visto en las últimas semanas con las manifestaciones de la extrema derecha israelí en la Puerta de Damasco en la Ciudad Vieja.

Allí, se encontraron frente a una población palestina que por lo general tratan de ignorar, pero con el Ramadán y las movilizaciones de los palestinos esto se hizo imposible.

BBC – ¿Cómo resumes el conflicto actual entre israelíes y palestinos?

Lemire: Podemos responder con una pregunta: lo que estamos viendo es una tercera intifada.

Estamos viviendo una nueva guerra en Gaza que no terminará inmediatamente, eso es seguro. ¿Pero estamos viendo una tercera intifada?

Durante años, creo que la tercera intifada ha estado en marcha. Ha estado operando desde al menos 2016 o 2017, especialmente en Jerusalén.

En julio de 2017, los jóvenes palestinos se rebelaron en Jerusalén contra la instalación de puertas de seguridad en la Explanada.

Ahora estamos en una situación similar: la defensa del espacio público del Casco Antiguo.

Intifada significa revuelta en árabe. ¿Es un motín? Sí, hay disturbios.

Está mucho menos estructurado que la segunda intifada y hay menos militarización.

Es más una movilización de la sociedad civil, de la juventud, con la ayuda de las redes sociales y con demandas muy concretas y pragmáticas.

BBC – Los gobiernos de todo el mundo piden moderación por ambas partes. ¿Qué más pueden hacer? Y, en su opinión, ¿qué ha hecho la comunidad internacional bien y mal?

Lemire: No soy el único que piensa que la presión internacional no funciona. Sólo tiene un impacto en el gobierno israelí, sus gobiernos de derecha y la opinión pública israelí.

Prueba de ello es lo que sucedió el lunes.

Después de la presión de la ONU, de Europa, pero principalmente de Estados Unidos, que reanudó una posición clásica, la misma que la administración de Donald Trump, el gobierno israelí señaló que quería una desaceleración.

Entre ellos estaba el Tribunal Supremo que tuvo que pronunciarse sobre la expulsión de las familias palestinas del jeque Jarrah, la prohibición de ir a la Explanada de las Mezquitas para los judíos israelíes, etc.

Sabemos que Qatar tiene un poder significativo y todo el mundo lo necesita para servir como intermediario entre Hamas y el gobierno israelí cuando hay un alto el fuego.

El actual conflicto palestino-israelí es un retorno a lo que se reprime en la agenda diplomática mundial: la situación ha sido ignorada por el mundo.

La era Trump dejó los ojos de los observadores, que eventualmente creyeron que el conflicto palestino-israelí podría terminar sin ser resuelto.

Hasta que se resuelva el conflicto, seguirá resurgiendo periódicamente, de diferentes maneras e inesperadamente.

 

BBC – ¿Todavía hay algún deseo de las partes de resolver este problema con dos estados?

Lemire: La solución de dos Estados nacionales (un israelí y otro palestino) murió hace mucho tiempo, especialmente con los 650.000 colonos israelíes asentados en Cisjordania.

Pero sobre todo, murió en el espíritu de los jóvenes palestinos. No está en su agenda ni piensan en ello.

Luchan por sus derechos, por sus espacios públicos, sus condiciones de vida y una forma de igualdad con sus vecinos israelíes.

Y lo mismo ocurre con los árabes que viven en Israel.

Por el lado israelí, resulta que, debido a la aparición de la derecha y la extrema derecha, gran parte del cuerpo político y el ciudadano común abogan por la anexión total y completa de gran parte de Cisjordania.

En cierto modo, ya hay un Estado binacional. En todo ese territorio hay un solo ejército en acción, una moneda, el shekel y una sola frontera, el israelí.

El Estado binacional palestino-israelí ya existe, pero es un Estado donde conviven individuos que no tienen los mismos derechos.

La solución de dos Estados está cada vez más separada y casi nadie habla más de ello.

BBC – ¿Cómo debería evolucionar el conflicto en los próximos días?

Lemire: Hasta el lunes pasado, habría dicho que era posible una rápida desaceleración, porque finalmente los jóvenes palestinos de Jerusalén obtuvieron la victoria que querían, lograron defender la Explanada de las Mezquitas, impidiendo la entrada de israelíes nacionalistas en la Ciudad Vieja.

Entonces esto podría haber terminado allí.

Pero después de lo que pasó el lunes por la noche, el lanzamiento de misiles de Hamas y la respuesta israelí, hemos entrado en otra fase.

Hay dos partes interesadas de que el conflicto continúa y que es fuerte.

El lunes, a las 6 pm, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, fue un jefe de gobierno humillado que pasó el día retirándose de las demandas palestinas en Jerusalén.

Fue duramente criticado por toda la prensa israelí, derecha, centro, izquierda.

Dos horas más tarde, fue puesto de nuevo en la posición que más le gusta: el señor de la guerra.

No veo una rápida reducción en la escalada. Por el contrario, probablemente veremos una intensificación del conflicto en los próximos días.

BBC – ¿Y a largo plazo?

Lemire: No tengo predicciones específicas. Pero puedo decir que la solución de dos estados ya no existe, ni siquiera teóricamente.

De hecho, estamos avanzando hacia un Estado binacional, con combates esporádicos y específicos de los palestinos para obtener los mismos derechos que los israelíes.