Catástrofe climática avanza más rápido de lo previsto

Científicos de la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos, han descubierto que las emisiones de gases antropogénicos de efecto invernadero contribuyen a un calentamiento más rápido de los océanos de lo que se pensaba anteriormente.

La tesis más reciente del equipo de la Universidad de California refuta la perspectiva de que el calentamiento global ha disminuido en los últimos 30 años.

Según el artículo científico publicado recientemente en Science, cerca del 93% de la energía solar capturada por el dióxido de carbono y otros gases se acumula en los océanos.

Los científicos señalan también que este índice no depende de variaciones anuales como el Niño (fluctuaciones de temperatura del agua en la superficie del Océano Pacífico) o de grandes erupciones volcánicas.

Los científicos analizaron datos sobre la temperatura del agua marina en los 2 000 metros por debajo de la superficie, su acidez y salinidad, recogidos a partir de mediados de los años 2000 con la ayuda de 4.000 boyas automáticas del proyecto Argo.

Estas boyas eran capaces de descender periódicamente a cierta profundidad. Este trabajo ha permitido perfeccionar los modelos existentes del cambio climático.

De este modo, los científicos sostienen que si no se toman medidas para reducir las emisiones de gases de invernadero, la temperatura del agua de mar en la capa superior, con un grosor de 2 000 metros, aumentará 0,78 grados Celsius para finales de siglo.

A su vez, este calentamiento elevará el nivel del agua del mar, debido a la expansión térmica, en unos 30 centímetros adicionales al aumento de la línea costera debido al derretimiento de los glaciares. El aumento de las temperaturas también provocará tormentas más severas, huracanes y precipitaciones extremas.

En 2013, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático presentó un informe según el cual el aumento real del calor en los océanos en los últimos 30 años es más lento de lo que prevén los actuales modelos climáticos.

Sin embargo, la nueva información facilitada por Argo es coherente con las previsiones sobre el rápido calentamiento del agua marina.