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¿Montesinos detrás de la campaña del tío “Porky”?

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«Más sabe el diablo por viejo que por diablo«

Entre 1990 y 2000, el gobierno de Alberto Fujimori impulsó una política para anular la actividad empresarial del Estado, con el asesoramiento de Vladimiro Montesinos -que al final daba el VB de los compradores-, vendieron a precio regalo las principales empresas públicas a manos privadas. Entre ellas: Perú Rail, Fetransa, Santuary Lodge, Perú Hotel Holding y Latin Security Corp, Acres Finance y otras empresas más a su amigo Rafael López Aliaga, hoy también involucrado en los Panamá Papers, por lo cual esta investigado en la Fiscalía por lavado de activos en contra del Estado, y hasta la fecha se está dilatando el caso.

No es que los chanchos vuelan, pero el “tio Porky” dio su primer en la política en 2006 cuando se convirtió en regidor de Lima. La segunda vez fue en 2011, cuando postuló al Congreso y aportó S/194,712 soles en efectivo, según la ONPE, para la campaña presidencial del “mudo” Castañeda Lossio con Alianza Solidaridad Nacional. No alcanzó una curul. Ahora, intenta ser presidente de la República y para ello tomó posesión de Solidaridad Nacional, y le  cambió de nombre por Renovación Popular. Hizo con una organización política lo que puede hacer con una empresa: la compra, cambia su identidad y la dirige. En su hoja de vida entregada al JNE, López Aliaga, solo declaró tres de las empresas que conduce actualmente: Perú Rail S.A., Perú Belmond Hotels y Ferrocarril Trasandino. Pero tiene muchas más.

López Aliaga, se siente orgulloso de pertenecer al “Opus Dei” y afirma que en su institución “no existe ningún caso de pedofilia”. “Soy del Opus Dei a mucha honra, con mucho orgullo, estoy muy feliz, tengo un plan de vida que practico, que leo todos los días para trabajar durísimo dentro de mi vocación”. Sin embargo no dice nada sobre los mentirosos, en una  nota de Perú21 publicada hace diez años, en febrero de 2011, indicaba que López Aliaga, con “Más de 170 demandas presentadas ante la Fiscalía y el Poder Judicial en los últimos años, entre archivadas y vigentes, quizá convierten al hombre de confianza de Luis Castañeda en uno de los mayores litigantes del país”. López Aliaga, parece tener como premisa de vida la denuncia judicial ante cuestionamientos sobre su ejercicio profesional y laboral”.

El tío “Porky”, candidato a la presidencia de la Republica de Perú por Renovación Popular, vende en sus entrevistas la imagen de EMPRESARIO EXITOSO, al mismo tiempo que en redes sociales difunde discursos de odio y de desinformación contra periodistas y activistas  que promueven la agenda de DDHH, a pesar de ser miembro del Opus Dei, de  su juramento de celibato, su confesa autoflagelación para cumplir su compromiso religioso. Recurre a orar a la Virgen María para controlarse a sí mismo. “Cuando veo un ‘mujerón’, le digo a la Virgen María ‘tú eres más bonita que esta chica’. Estoy tan enamorado de la Virgen María, que me llena de paz, de alegría y de fortaleza.

El tío «porky”, señala en todas sus entrevistas estar muy enamorado de la Virgen María, es evidente que publicita su castidad, virginidad, abstinencia y celibato -hasta su flagelación-, con el fin de ganarse el voto de los incautos que se golpean el pecho, que lo ven como el nuevo “Mesías”. Casi igual, como en  tiempos de Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos con la virgen que llora -bajo el guión de Sigisfredo Luza, el autodenominado padre del psicosocial en el Perú, los diarios ‘chicha’ y la prensa escrita, televisiva y radial- se esmeraban en reportajes sobre los supuestos ‘milagros’ o ‘apariciones’. Tremenda cortina de humo para desviar la atención de la opinión pública de los excesos del fujimorato. Fantasía y falsedad, esta figura es usada por López Aliaga.

Se puede confundir la “devoción” a la Virgen María con una especie de “enamoramiento” religioso, como un Gimmick publicitario o comunicacional para lograr que el mensaje sea atractivo y de personalidad al candidato? la verdadera devoción a la Santísima Virgen María, “no es otra cosa que una voluntad pronta para entregarse a todo lo que pertenece al servicio de Dios”. No un producto que se etiqueta y vende.  La devoción, pues, radica en la intimidad del que se siente inclinado al servicio amoroso de quien le es superior, que en el caso que nos ocupa es la Madre de Dios y Madre de todos los hombres. La verdadera devoción a María, no es un afecto estéril y pasajero, ni una vana credulidad, sino que la recta devoción a Santa María necesita de una fe viva, que lleva al amor y se traduce en imitación.

El candidato de Renovación Popular, López Aliaga, como miembro del Opus Dei, sobre la eutanasia y la violación de niñas tiene conceptos retrógrados que riñen con la justicia y su declarado amor a la Virgen María, comentarios sin duda, sin esfuerzo intelectual alguno, sin análisis crítico de la realidad, con argumentos que no resisten la prueba de la hermenéutica, ni filosófica ni teológica. Desoye las opiniones de los expertos y adopta posiciones dogmáticas inmisericordes, soberbias. Viendo el resumen de sus incoherencias y torpezas he llegado a la conclusión  que Rafael López Aliaga, es un atorrante con plata peor que Cesar Acuña, que necesita urgente un psiquiatra, como aquellos que deliberadamente lo apoyan.

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