Una de las flores más raras del mundo ¿Sabes lo que es esa cosa extraña?

¿Sabes lo que es esa cosa extraña de la foto? Una de las flores más raras del mundo

A primera vista, la imagen extraña parece mostrar algún tipo de animal marino extraño, Sin embargo, en vez de bicho, se trata de una planta — y una muy, muy rara, una que nadie veía hace más de 150 años! De acuerdo con Jason Daley, del sitio web Smithsonian.com el curioso vegetal endémica de Malasia, fue descubierto por el botánico italiano Odoardo Beccari en el bosque de Sarawak en 1866 y, desde entonces, nunca más fue visto.

Diseño de Odoardo Beccari (Science Alert)

Hasta que, el año pasado, un equipo de investigadores checos, que visitó la misma región explorada por Odoardo y, adivina! Sí, los científicos han tropezado con la misma flor. Ella pertenece a la especie Thismia neptunis, y como se vio en el historial, es muy rara. Tanto que, hasta donde se sabe, las fotos que incluimos a lo largo de la materia son las primeras y únicas de esa planta (Odoardo sólo hizo dibujos y descripciones detalladas un siglo y medio atrás).

Rareza

Según Jason, la parte de la flor de la planta mide menos de diez centímetros de altura, pero el pequeño tamaño no es la única cosa que hace que la observación de las T. neptunis difícil. Según los científicos explicaron, estas plantas pasan la mayor parte de sus vidas bajo tierra y sólo aparecen en la superficie cuando están listas para florecer.

Esquisitinha (Science Alert/Sochor et al)

Durante este proceso, un tallo de color crema con un bulbo anaranjado en la punta aparece y, cuando la floración ocurre, la planta se abre y tres estructuras que recuerdan antenas aparecen. Otra curiosidad es que, como las T. neptunis no hacen fotosíntesis, obtienen nutrientes de los hongos que proliferan en el suelo cerca de las plantas que, sí, sintetizan sus alimentos a partir de la luz solar.

¿No recuerda un alien? (Science Alert/Sochor et al)

En cuanto a las flores, ellas sólo duran un par de semanas y sólo se producen una vez al año — y mira allí! Así, con un comportamiento peculiar como estos, no es de extrañar que hayan pasado tanto tiempo sin ser vistas. Esperemos que ahora que se fueron redescubiertas la gente no decide buscarlos y cosecharlas hasta la extinción.

 (Atlas Obscura/Michal Sochor)