La fuga de El Lagarto II – VIZCARRA

Fiscal Juárez Atoche se confío y no pudo atrapar al mendaz Vizcarra Cornejo, pero más temprano que tarde caerá en las redes.

Enorme indignación ha provocado la resolución de la jueza María de los Ángeles Álvarez Camacho que no otorgó prisión preventiva de 18 meses para Martín Vizcarra Cornejo, ex presidente de la República y hoy candidato al Congreso.

Resulta inconcebible ver a un señor haciendo campaña y paseándose por el país, a sabiendas de que tiene un proceso con graves y fundados elementos de convicción por los delitos de cohecho pasivo y colusión, con pruebas irrefutables de su acción típica, antijurídica y culpable.

«El Lagarto», un ser cínico y mentiroso, es un político audaz, avezado y habilidoso, desde cuando era Gobernador y después presidente logró ir dominando al Poder Judicial y al Ministerio Público.

Se hizo también de los medios de comunicación más importantes del país y creaba opinión, desinformaba y manejaba los mensajes como más le conviniera. Para ello utilizó la publicidad estatal, millones y millones, incluso en plena pandemia y antes de ella, soltaba miles de millones de soles. Periodistas y lideres de opinión eran comprados con prebendas, nombramientos, licitaciones, etc., de amigos y familiares (caso de la hermana de la actual presidenta del Poder Judicial, Elvia Barrios, a la sazón Rocío Barrios, ex ministra de la Producción, por eso la tenía este señor). También el caso recientemente descubierto, de la periodista Mávila Huertas que visitaba en privado y secreto al tartufo, conducta que se repite en los casos de periodistas como Augusto Álvarez, Mónica Delta, entre otros, que han sucumbido a los encantos del dinero fácil y mal habido, a través de sendas consultorías.

En la foto con una de sus coacusadas en en el caso Richard Swing, la ex todopoderosa Miriam Morales.

La inmunidad

Este sujeto había pensado salirse con la suya postulando al Congreso y, de esta manera, obtener la «impunidad» parlamentaria a sus delitos, pero el tiro le salió por la culata, los congresistas se ele adelantaron y derogaron la norma. Ahora tendrá que pagar por sus fechorías, esta figura también era una forma de evadir y obstaculizar a la justicia, pues al ser congresista había que pedir un antejuicio y el levantamiento de su inmunidad para juzgarlo.

Bien hubiera podido ser utilizado este argumento por el fiscal Juárez Atoche, para reforzar su pedido de prisión preventiva. La conducta de este señor, por todos conocida, es mentir, mentir y mentir. Hay un grueso sector que aun le cree a pesar de las circunstancias pobres ingenuos y desvariados.

No dudo que cuando se vea acorralado, El Lagarto buscará asilo político, u otro medio para huir del país, no está lejos de la verdad la hipótesis del fiscal Juárez Atoche de que podría asilarse este miserable. Será recordado por ser siempre un mentiroso, ruin, embaucador, coimero y traidor por haberse vacunado a escondidas del país.