En el Perú, 16 mujeres desaparecen al día. El aumento es «alarmante»

El organismo de derechos humanos defiende al pueblo peruano que hoy considera «alarmante» el aumento en el número de mujeres que desaparecen diariamente en Perú, que pasó de cinco antes de la pandemia, a ocho durante el confinamiento y actualmente llega a 16.

«Es preocupante, porque estamos hablando sobre todo de mujeres que son, en su mayoría, Niñas y adolescentes», dijo Eliana Revollar, subdirectora de la Unidad de Derechos de la mujer de la Organización Peruana para la defensa y promoción de los derechos humanos, a la Agencia de Noticias France-Presse (AFP).

Durante el primer semestre del año, al menos 2.891 mujeres fueron reportadas desaparecidas en Perú, un país de 33 millones de habitantes, un promedio de 16 por día.

Cerca de dos tercios de las mujeres son menores de edad, agregó Revollar.

Según datos oficiales, durante el confinamiento asociado a la pandemia de covid-19, que tuvo lugar en Perú entre marzo y junio de 2020, se registró un promedio de ocho desapariciones diarias, mientras que este número fue de cinco en 2019.

«Es un número alarmante, ya que hay una relación entre desapariciones y feminicidios», enfatizó Revolver.

En 2019, una décima parte de los 166 feminicidios registrados en el país fueron clasificados inicialmente como» desapariciones», según la organización.

Durante el primer semestre de este año se contabilizaron 76 feminicidios, cifra similar a la registrada a lo largo del año 2020.

«Tenemos casos en los que los compañeros, después de matar a la mujer, registran la desaparición y (afirman) que los están buscando», explicó Revollar.

Las familias de lamentar que la policía y el sistema judicial no investigar las desapariciones, en el supuesto de que las mujeres dejaron la residencia voluntariamente.

«No hay una investigación seria. Pensamos que la policía nos ayudaría, pero ese no es el caso. Es como si la Tierra se los hubiera tragado», lamentó, por su parte, Patricia Acosta, quien lleva cinco años buscando a su hija de 23 años y dos líquidos, desaparecidos después de participar en una fiesta de cumpleaños en Lima, el 24 de abril de 2016.

En febrero de 2020, el descubrimiento, en Lima, del cuerpo mutilado de Solsiret Rodríguez, de 23 años, estudiante y activista contra la violencia de género, quien desapareció cuatro años antes, generó gran controversia y controversia en el país.

Su desaparición movilizó a las asociaciones feministas, pero la policía dijo que Solsiret Rodríguez se había ido al norte de Perú con una amiga.

El entonces Ministro del Interior peruano, Carlos Basombrio, había asegurado lo mismo ante el Parlamento.

Después de que el cuerpo fuera encontrado, Basombrio se disculpó y reconoció la «ligereza» de la investigación.

El cuñado de la joven y el hombre con quien vivía Solsiret fueron arrestados, después de ser acusados del asesinato.