Perú: Masacre atribuida a Sendero Luminoso ensombrece elecciones nacionales

Al menos 16 personas, entre ellas dos menores de edad, murieron en un ataque atribuido a un disidente de Sendero Luminoso, dos semanas antes de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.

A menos de dos semanas de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, el Perú ha vuelto a sentir la amenaza del terrorismo. Al menos 16 personas, entre ellas dos niños, fueron halladas muertas en una zona remota después de un ataque atribuido a una célula vinculada al grupo terrorista conocido como «Sendero Luminoso».

La masacre tuvo lugar en un bar el domingo por la noche en un pequeño pueblo en la región del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), una extensa área geográfica en el centro de Perú donde históricamente Sendero Luminoso tuvo sus bastiones. Es una región montañosa y selvática de difícil acceso y ahora está dominada por el cultivo de coca.

Hay cierto desacuerdo sobre el número de víctimas, con la policía reportando 18 muertos y el gobierno peruano reportando 16. Entre los cuerpos encontrados, seis estaban carbonizados y el resto había recibido disparos, dijo la ministra de Defensa, Nuria Esparch. Se identificaron dos menores: un bebé de un año y un niño de 13 años.

La policía encontró volantes junto a los cuerpos de las víctimas identificando al militarizado Partido Comunista del Perú, el grupo de inspiración maoísta conocido como Sendero Luminoso fundado en la década de 1960 que durante más de tres décadas fue responsable de varios ataques contra el Estado peruano. Según las estimaciones de la Comisión de la verdad y Reconciliación, el conflicto dejó más de 69 mil víctimas, entre ellas muertos y desaparecidos.

El grupo sufrió varias mutaciones y, a lo largo del enfrentamiento contra las fuerzas de seguridad peruanas, se alejó de su carácter de guerrilla política revolucionaria. Hoy en día, su patrimonio es reclamado por pequeñas milicias confinadas en algunas zonas del VRAEM y dedicadas casi exclusivamente al tráfico de drogas. Abimael Guzmán, el líder histórico de Sendero Luminoso, encarcelado desde 1992, no reconoce a los grupos que actualmente se presentan como extensiones de la organización que fundó.

Llamamiento a un boicot electoral

El ataque llega en un momento delicado en Perú, que en dos semanas tendrá la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, programada para el 6 de junio. Según los medios locales, se dejaron volantes en el lugar llamando a un boicot electoral y llamando a los que votaron por la candidata de derecha, Keiko Fujimori, «traidores».”

Ataques similares por parte de grupos asociados con Sendero Luminoso también ocurrieron en la víspera de las elecciones presidenciales de 2011 y 2016.

Esta vez, sin embargo, el escenario para la segunda ronda está altamente polarizado. Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori, responsable de intensificar la lucha contra el grupo maoísta y el arresto de Guzmán, se enfrenta a Pedro Castillo, un sindicalista de izquierda que ya ha sido acusado por opositores de estar cerca de Sendero Luminoso, acusaciones que siempre ha negado.

Castillo condenó la masacre y pidió «el peso de la ley» sobre los responsables tan pronto como sean encontrados. El Secretario General de su Partido Perú libre, Vladimir Cerrón, trató de asociar el ataque con Fujimori, diciendo que «es la derecha la que necesita a Sendero para querer ganar».

Fujimori condenó la sugerencia de Cerrón, acusándolo de lucro político. «Ante este tipo de ataques, los peruanos deben estar más unidos más que nunca», dijo la candidata, que también lamentó la masacre.