COMPLACENCIA DE LAS FF.AA. Y DESGOBIERNO

«NO SE TRATA DE UN GOLPE SINO UNA ADVERTENCIA: PREOCUPADOS POR LA GRAVE SITUACIÓN DE RIESGOS A LA SEGURIDAD Y DEFENSA NACIONAL OCASIONADA POR LAS AUTORIDADES DEL PODER EJECUTIVO».

El comunicado de altos mandos de las FF.AA. (r) es un llamado de atención a la pasividad del Presidente del Comando Conjunto de las FF.AA., oficiales en actividad, autoridades y sociedad en su conjunto, ahora que la Patria esta en peligro de ser destruida por una banda de prosenderistas, narcos y delincuentes infiltrados en altos puestos del Estado.

Sobre las relaciones entre los militares y el proceso democrático, quiero señalar que en los últimos años fueron maltratadas especialmente por el inefable «lagarto Vizcarra» y la ministra Montenegro al posar con sus «mandiles rosados» en vez del uniforme de la Patria. Claro que no ha sido fácil soportar esta humillación al Ejercito de Bolognesi,  más aún cuando aquí en nuestro país, en América Latina y en gran parte del resto del mundo hoy a las FF.AA. se les atribuye un estatus especial (o se  autoatribuyen), dentro de la mayoría de las sociedades. Dicho estatus implica que los militares se sientan no solo responsables de la defensa de la patria frente a terceros, sino también garantes de la estabilidad del sistema político de su país.

Hoy, frente al peligro de los enemigos de la patria, de tener un Congreso sin pantalones, un Ministerio Público y Poder Judicial ciego, sordo y mudo, es preciso revisar estas dos funciones  tradicionalmente adjudicadas a las Fuerzas Armadas. Por una parte, las amenazas y los conflictos históricos han perdido relevancia, y las nuevas amenazas, que provienen de la fragilidad de los Estados y del crimen organizado y corrupción general, etc etc hechos  que implican la revisión del concepto de «defensa nacional» y reforzarlas.

Porqué es importante analizar el aviso o comunicado publicado el viernes pasado, de decenas de altos mandos de las Fuerzas Armadas, pronunciamiento que debería ser considerado con mucha atención por las instituciones de la sociedad y el Estado, así como por la ciudadanía?

Los oficiales en retiro puntualizan sin pelos en la lengua, con precisión,  el motivo de su comunicado: “preocupados por la grave situación de riesgos a la Seguridad y Defensa Nacional ocasionada por las autoridades del Poder Ejecutivo”.

Hoy en nuestro país no solo está en riesgo la democracia y el bienestar de todos los peruanos, sino la seguridad y la defensa nacional, el futuro de todos los peruanos y el culpable inequívoco es el Gobierno, por ello detallan una larga lista de hechos que evidencian las tropelías cometidas por el desgobierno de Pedro Castillo:

– El presupuesto de Defensa más bajo de las últimas décadas para el 2022.

– El mal empleo de los escasos recursos de las FF.AA. (helicópteros, aviones y vehículos)

– La evidente complacencia de la inaceptable injerencia extranjera (Cuba, Bolivia y Venezuela) en el quehacer nacional

– La interferencia en los procesos de ascensos de oficiales de las FF.AA., afectando la meritocracia y la línea de comando.

– El relevo arbitrario e injustificado de los Comandantes Generales del EP y la FAP, afectando la institucionalidad de las FF.AA.

– El empleo inadecuado de las Fuerzas Armadas contra la delincuencia común y el crimen organizado.

– La desatención a los actos delincuenciales contra los principales centros de explotación minera del país, que ocasionan el deterioro de la economía nacional.

– La intención de cerrar 45 bases contraterroristas en el Vraem, pese a la presencia de remanentes terroristas de Sendero Luminoso.

– La designación de prefectos y subprefectos pertenecientes al Conare-Movadef (asociado a Sendero Luminoso).

– La desacertada política contra el narcotráfico y minería ilegal.

– El nombramiento de autoridades y funcionarios del Gobierno con antecedentes penales diversos y judiciales de terrorismo y/o apología al terrorismo.

– La sucesiva provocación a la violencia de los principales políticos del partido de gobierno, que buscan la destrucción del Estado de Derecho.

– Las permanentes denuncias de probables actos delictivos que involucran a altos funcionarios del Estado y al mismo jefe de Gobierno.

EN CONCLUSIÓN;

“No se  puede permitir la realización de constantes y permanentes acciones que ponen en peligro la institucionalidad, dignidad, integridad, seguridad y defensa nacional”, por lo que exhortan “a las Instituciones Nacionales que adopten las «decisiones y medidas correspondientes», para cumplir de manera cabal y correcta con las obligaciones y deberes establecidos en nuestra Constitución”. (La exhortación también incluye al Presidente, como un formulismo, porque es obvio a estas alturas que ese individuo no va a rectificar su aviesa conducta).

El tiempo para revertir esta situación se agota. Esperar impasibles el zarpazo –anunciado por los cabecillas de la gavilla encaramada en el poder- es suicida. Las instituciones deben tomar las medidas correspondientes para cumplir con su deber.