Congresistas transfugas amenazan a la representación política

Se  cambian de bancadas como se cambian de calzoncillos.

Los viejos partidos políticos, partiduchos y movimientos  de caudillistas, han fracasado en los últimos 30 años en nuestro país cuando quedaron expuestas a sus propias debilidades por falta de representacion, el descredito, apetitos particulares y defraude a la población; a ello se debe la crisis de representacion que abrió fractura de desafección con la ciudadanía y sus sentires.

1.A través de la disección de esta crisis que colapsa el sistema de partidos en el Perú, la “alternativa más cruel -acaso la más real-aprendemos a vivir con el virus de la crisis de representación y nos acostumbramos a la política de la «distancia social’ y la «inmunidad de rebaño» o exterminarla.

2.Es evidente que  los síntomas de la crisis de representación, es el transfuguismo político una pandemia como el cáncer y el sida  que sacude nuestra democracia, como consecuencia de la falta de partidos sólidos que colocan a cualquier aventurero como candidato expres al Congreso? Qué hacemos  frente a la sacada de vuelta de congresistas a su bancada, con miras electorales o para poder presidir comisiones en la nueva mesa directiva? En Perú Libre, entraron 37 , ahora son sólo 15, pero cuando quieren joder a la oposición, se juntan de nuevo para tener votos en muchas comisiones!!!

3.Cuál es la disyuntiva ¿limitar o erradicar el transfuguismo parlamentario? Acaso esto no implica necesariamente en alguna medida limitar los derechos políticos de los ciudadanos, particularmente el derecho a elegir y ser elegido y el de libre asociación?Determinar en qué punto este fenómeno transgrede la calidad de la representación o el compromiso de un candidato con un programa electoral es lo que hace difícil regularlo legalmente o condenarlo moralmente.

4.No es lo mismo cambiar de partido político durante una campaña electoral para tener mayores oportunidades de conseguir una candidatura, que hacerlo en el ejercicio de funciones en un cargo público, sobre todo si el cambio implica un cambio de posición significativo sobre ciertos contenidos programáticos por los que los electores votaron? A quien le pertenecen los votos, al partido que lo llevó al Congreso o al candidato? Se le puede pedir disciplina partidaria, a candidatos independientes bajo el contexto de crisis de los partidos tradicionales, en vez de censurar pagos de cupos?

5. Este cáncer se desarrolla en un contexto de desintegración del tejido social y partidario, tres ejemplos: APRA, AP y PPC. La ambición de viejos líderes que no quieren dar paso a la nueva generación, la crisis socioeconómicas, fragmentación y desafección partidaria, el surgimiento de nuevas fuerzas políticas de fachadas, movimientos sin doctrinas, el mismo debilitamiento de las instituciones democráticas y la polarización de la ciudadanía,  son algunos de los fenómenos que se han dado en nuestro país, son hechos  que han impactado en los últimos procesos electorales.

6. «Para distraer a la opinión pública: dictamen de CONGRESISTAS  que aprueban las modificaciones de la ley contra el transfuguismo está siendo apoyada por algunas bancadas».

7. Dejemos de echarle la culpa de todo los males al fujimontesinismo, padre del transfuguismo parlamentario o cambio de grupo o fracción con la finalidad de garantizar la votación en el Congreso. El tránsfuga se desvincula del partido al que pertenece, porque no tiene formación política y llega como invitado. Esta es una mala práctica que aumenta los debates acerca de su legitimidad y las medidas para erradicarla.

Por último, detrás de todo esto, están los caviares, rojetes y morados, quienes buscan deslegitimar a los partidos políticos como mediadores entre la ciudadanía y las instituciones para afectar la calidad democrática y de la representación. Gran parte de esta proliferación de partiduchos sin planes ni ideario político es responsable Fernando Tuesta que presidio la Comisión de Alto Nivel, ese mamarracho de la Reforma Política (2019) en el gobierno del lagarto Vizcarra.

«Las Elecciones Regionales y Municipales 2022 volvieron a exponer la derrota de los partidos políticos tradicionales y la acogida significativa que tienen los movimientos regionales en distintos puntos del país. Para el exjefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Fernando Tuesta sigue con el cuento que el fracaso de las agrupaciones políticas no es nuevo, pues se visualiza desde hace tres décadas».