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A PESAR DE TODO JESÚS MURIÓ POR NOSOTROS

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Libertad de opinión es lo que la gente quiere escuchar…

Hablar de religión católica muchas veces incomoda a los ateos; otros hombres de poca fe, dudan que un hombre llamado Jesús vivió hace 2.000 años, en parte de lo que hoy se conoce como Israel. También hay de los que dicen que era un judío disidente, que acabó liderando un grupo de seguidores y que sus acciones terminaron molestando al Imperio romano. En esta viña del señor hay de todo como en botica.

En Semana Santa recordamos los hechos más importantes en la historia de la humanidad, los sucesos que cambiaron para siempre la vida de millones de personas alrededor del mundo. Me refiero a la muerte y resurrección de Jesucristo. La Biblia es clara al afirmar que el Hijo de Dios se hizo hombre y habitó entre nosotros con un propósito principal, dar su vida para que nosotros pudiéramos recibir la vida eterna. 

1.Según mi formación cristiana en el que fundan mis creencias, Jesús de Nazaret murió crucificado por orden del entonces prefecto romano en Judea, Poncio Pilato, y su tránsito hasta esa muerte -una serie de episodios conocidos como la Pasión- es uno de los elementos centrales que se conmemoran en una fecha llamada Semana Santa.

2.Tan central fue la crucifixión  de Jesús en la historia del cristianismo, que la cruz finalmente se convirtió en el símbolo de las religiones que profesan devoción a la figura de Jesucristo. De ahí, se preguntan ¿qué pasó con aquella cruz donde ocurrió su muerte? Veamos,  decenas de monasterios e iglesias alrededor del mundo señalan tener al menos un trozo de la llamada «vera cruz» en sus altares, para la alabanza de sus fieles? Lo mismo pasa con el «manto sagrado»…

Nadie sabe a ciencia cierta cómo era la cruz. De todas formas, la Biblia nos deja ver que Jesús no murió en una cruz, sino en un madero, o palo vertical. La Biblia  suele usar el término griego «stauros» (Mateo 27:40; Juan18:17). Pese a que muchas traducciones vierten esta palabra como “cruz”, numerosos eruditos opinan que “denota, primariamente, un palo o estaca derecha”. 

3.La fecha de la Crucifixión de Cristo ha sido siempre objeto de debate. Estudios realizados en la Universidad de Oxford por los profesores  Colin J. Humphreys y W. G. Waddington, publicados en la revista científica Nature, han llegado a la conclusión que el día de la muerte de Jesucristo fue el 3 de abril del año 33 de nuestra era. Para ello se basaron en cálculos astronómicos y los relatos de Poncio Pilatos.
4.Parten de la teoría de que Jesús murió el día antes del comienzo de la fiesta judía de la Pascua, que duraba 8 días y se celebraba durante la Luna llena de primavera en el mes judío de Nisan, que es el marzo o abril actual. El relato de Poncio Pilatos dice que el Sol se oscureció, salieron estrellas en el cielo, hubo que encender candelas y por la noche la luz de la Luna se volvió de un color rojo sangre.
5. Efectivamente, todo indica que el día de la ejecución hubo en Jerusalén un eclipse parcial de Luna, que unido a una tormenta de arena (que cuentan las fuentes históricas) dio ese color rojizo.
Pues bien, investigando cuándo se produjo ese eclipse entre los años 26 y 36 durante los meses de la Pascua de Nisan y uniéndolo a lo dicho por Pilatos, ocurrió un día 3 de abril del año 33, a las 18.20 horas, el cielo se oscureció y una luna roja dominó el horizonte de la ciudad.

Nota: Todos los datos están sacados, casi exactamente, de la revista Quo el diario. 

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Jaime Uribe Rocha Periodista y columnista en medios escritos, experto en marketing político

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