Actualidad

LA PASIÓN DE CRISTO: A DÓNDE NOS LLEVA EL FILME DE MEL GIBSON

Published

on

587 Vistas
¡Clickear Stars!
(Votos: 3 Promedio: 5)

Hasta la fecha levanta comentarios la estremecedora película que relata la agonía y sufrimiento de las últimas doce horas de la vida de Jesús, su condena y muerte. Las principales críticas se concentraron en el antisemitismo y la violencia extrema en la película.

Hoy que estamos en Viernes Santo es buen momento de reflexión y hablar sobre la película LA PASIÓN DE CRISTO. Días antes de iniciar el rodaje, Mel Gibson avisó a Jim Caviezel que el personaje iba a ser muy difícil y, que si aceptaba el papel, podría acabar marginado en Hollywood.

Jim Caviezel, pidió un día para pensarlo y respondió: “Creo que tenemos que hacerlo, aunque sea difícil. Además, mis iniciales son J. C. y tengo 33 años. No me había dado cuenta hasta ahora”. Mel respondió con un sincero: “Me estás asustando”.

Durante el rodaje, el actor Jim Caviezel (en el papel de Jesús de Nazaret) perdió unos 20 kilos, le alcanzó un rayo, recibió por accidente dos latigazos que le dejaron una cicatriz de 14 centímetros, se dislocó el hombro y sufrió de neumonía e hipotermia por estar colgando casi desnudo en una cruz durante varias horas en el exterior.
Su cuerpo estaba tan estresado y agotado por interpretar el papel que tuvo que someterse a 2 cirugías a corazón abierto al terminar la producción. La escena de la crucifixión por sí sola tomó 5 semanas de los 2 meses de filmación.

“No quiero que la gente me vea a mí. Sólo quiero que vean a Jesús. A través de eso las conversiones ocurrirán”.

Para rodar las tomas en las que Jesús aparece ensangrentado se necesitaron hasta 30 litros de líquido. Para algunas escenas, Caviezel aguantó sesiones de siete horas de maquillaje y en alguna ocasión tuvo que dormir. Además tuvo que aprender arameo, hebreo y latín para poder realizar algunas escenas.

Unos cuantos sucesos curiosos tuvieron lugar. Pedro Sarubbi, que interpretó a Barrabás, al representar esa parte sintió que no fue Caviezel el que lo miró sino el propio Jesucristo.«Sus ojos no tenían odio ni resentimiento conmigo, sólo misericordia y amor”.
Luca Lionello, quien interpretó a Judas, era un declarado ateo antes de comenzar el rodaje. Al terminar se convirtió, confesó y bautizó a sus hijos. Uno de los jefes técnicos que era musulmán también se convirtió al cristianismo. Algunos productores aseguraban haber visto a unas personas vestidas de blanco dando consejos, que al terminar el rodaje no volvieron a aparecer.

Un éxito total: La Pasión de Cristo es la película con clasificación R más taquillera de todos los tiempos en Estados Unidos ¡Con 370,8 millones de dólares! En todo el mundo recaudó 611 millones de dolares.
Mel Gibson invirtió 30 millones de dólares de su propio bolsillo para la producción porque ningún estudio quería hacerse cargo del proyecto.

Se ha anunciado la secuela La Pasión de Cristo: Resurrección’, también dirigida por Mel Gibson, pero no se ha concretado cuando estará lista. 

Al estar en el mundo cinematográfico desde 1975 (gracias a la oportunidad que me ofreció mi amigo Alfonso Díaz Luy, gerente de Distrifilm, y despuésotras exitosas distribuidoras cómo Continental Film, Pesa, Venus Film, Radio Film, Ultramar Film, Rodo Film, Películas Internacionales, etc. que las recuerdo con mucho cariño)hasta 1998. No podía rehuir a ver estás películas de contenido violento y/o acción, al contrario a muchas le ponía el título (comercial) con la aprobación de la distribuidora. Tenía que encontrar el mensaje para atraer al público a través de la publicidad en los medios.

«La Pasión de Cristo», como película debo decir que ha sido construida con pasión, y con criterio actual. Muy buen guión (es evidente que que el Nuevo Testamento canónico no recoge el aspecto de la intervención del «maligno» durante los momentos clave del sufrimiento, físico y/o psíquico, tentándole a dejar la tarea que llevaba entre manos Jesús. Se echa de menos el consuelo espiritual de fortaleza tras la superación de la tentación (Lucas 22.43), ante la inminente aparición de Judas y soldadesca.

El guión sigue a la letra el proceso de tortura. Dadas las expresiones que los sayones protagonistas expresaban el acoso sobre el atormentado, como la descarga de su corpulencia (el casting los buscó fieros, en verdad), bien en forma de golpes con los brazos y puños sobre la corona de espinas, así como de las varas y látigos enjaezados con trozos de huesos en sus colas (40 menos 1 de la ordenanza, aunque no se ve que pudieran ser un centenar).

Tanto de camino al lugar de Caifás y de Pilato, no dejaban de de golpear. De haber sido tal cómo se muestra en la película, el cuerpo de Jesús o de cualquier ser humano no puede llegar en condiciones de izar ni un metro desde el suelo el travesaño de la cruz, de unos 20 kg ( para que la cruz compuesta pese unos 70 Kg, aunque fueran 50 kg para ser recorridos unos 500m cuesta arriba hasta el Golgota).

Esta exageración (muy buena puesta en escena, excelente maquillaje, y excelente actor),acompañada de buen argumento y realización. Claro, yo veía primero las películas y después invitaba a periodistas a salas de pruebas y la vean en exclusiva y  recibir su opinión. La película, está bien hecha,  exagera un poco la proporcionalidad del castigo a la resistencia del cuerpo humano. O tal vez no, por la divinidad de Jesús. «Verdaderamente este hombre era justo» (Lucas 23,47).

Finalmente esta película, para ser un testimonio no exclusivamente filmográfico sobre la Pasión de Jesús, habría que contextualizar: cómo desde Abraham y los Profetas anuncian el Pacto de Dios con el pueblo elegido, y su invocación al Mesías (a quien los suyos no le recibieron), que vino a dar el cumplimiento de la Ley con el nuevo mandamiento («que os améis los unos a los otros como yo os he amado»), cómo en la cena de despedida enseña cómo se realiza el amor, mediante el servicio (Yo vine a servir y no a ser servido).

En este contexto, ya predijo Jesús en muchos momentos a sus discípulos de qué forma esperaba dar cumplimiento a sus enseñanzas, y lo que le esperaba. No cabe duda, que la traición de Judas y las negaciones de Pedro, aparte del trato humano por los judíos y romanos, suponía el reto de la muestra del por qué estaba él en el trance de atravesar todo el dolor humano, física y psíquicamente. Esto no tiene sentido (como dijo Pablo de Tarso) sin la Resurrección. Cristo resucitó.

Se rumorea que Mel Gibson va a producir una película cuyo argumento expondría las vergüenzas de la agenda 2030. El guión está en la lista negra de Hollywood, pero Gibson habría decidido valientemente llevarlo a la pantalla y contar la historia de la família Rothschild, arderá la pantalla.

Facebook Commentarios

Tendencias

Salir de la versión móvil