¿Por qué BIDEN ignoró a TESLA para discutir Electrificación?

TESLA AUSENTE – El jueves pasado, el Presidente de los Estados Unidos organizó un evento para hablar con los fabricantes de la industria automotriz sobre la electrificación y las restricciones en el consumo de combustible en los automóviles en el futuro. Representantes de marcas como Ford, General Motors y Chrysler estuvieron al lado de Joe Biden, con el representante incluso conduciendo un Jeep durante el evento. Sin embargo, la ausencia fue la del CEO de Tesla.

Ausencia de Tesla

Joe Biden ignoró a Tesla – el presidente conduce Jeep en la Casa Blanca

Elon Musk, quien es reconocido mundialmente como uno de los grandes pioneros de la industria automotriz que tiene como objetivo controlar la emisión de contaminantes. La razón de esto es que las fábricas de Tesla, a diferencia de los fabricantes de automóviles antes mencionados, no tienen ninguna conexión con el sindicato.

Históricamente, la marca se ha resistido a la sindicalización de su planta de California. Por lo tanto, sólo los tres grandes siguen siendo los fabricantes de automóviles que pertenecen al sindicato estadounidense, el Sindicato de Trabajadores de Automóviles (UAW).

Musk incluso respondió a las críticas en su Twitter durante la reunión. «La realidad es totalmente opuesta a lo que dicen los críticos», dijo el CEO de Tesla. «El mayor desafío es contratar a suficientes personas para construir automóviles. El Área de la Bahía de San Francisco tiene un desempleo esencialmente negativo, por lo que las personas en nuestra fábrica tienen varias otras ofertas de trabajo. Si no eran tratados bien, se iban de inmediato».

Biden también se tomó un momento para decirle a la directora ejecutiva de GM, Mary Barra, que le gustaría un Corvette totalmente eléctrico. Continuó diciendo: «Tengo una cita con Mary que cuando hagan el primer Corvette eléctrico seré la primera persona en dirigirlo»

El presidente afirmo en que el país está «en una competición con China, y muchas otras naciones, por el siglo XXI» y para ganar hay que asegurarse de que «el futuro esté hecho en Estados Unidos».

Y añadió una advertencia que ya ha hecho en otras ocasiones, la de que «el futuro del sector del automóvil es eléctrico, y no hay vuelta de hoja». «La cuestión es si vamos a liderar o quedarnos detrás en la carrera por el futuro; si produciremos estos vehículos y las baterías aquí o si vamos a tener que depender de otros países; si los puestos de trabajo que van a producir los coches y las baterías son empleos sindicalizados con buenos salarios, empleos que van a sostener el continuo crecimiento de la clase media», continuó Biden

Antes de firmar la orden ejecutiva, el presidente estadounidense volvió a referirse a China para dejar claro que en la actualidad el gigante asiático lleva la delantera en la carrera por la electrificación del automóvil al contar con el mayor mercado doméstico de VE y controlar la producción de baterías.

«No hay razón por la que no podamos recuperar ese liderazgo. Pero nos tenemos que mover con rapidez», concluyó Biden.

El presidente también se refirió en términos similares a la producción de semiconductores, cuya escasez está provocando graves problemas a los fabricantes de automóviles, y se comprometió a que la crisis no se repetirá. Para alcanzar el objetivo de que el 50% de las ventas anuales de vehículos en Estados Unidos sean eléctricos, o híbridos, para 2030 mucho tiene que cambiar en el mercado.

En la actualidad, menos de un 2% de todos los automóviles que se venden en el país son VE, lo que coloca a Estados Unidos en el puesto número 20 de la clasificación mundial. Mientras, China duplica a EEUU en el número de VE y la tasa de crecimiento de su mercado doméstico es el doble de la del país norteamericano.