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A la izquierda caviar no le interesa reducir la desigualdad y la pobreza en el país
A la izquierda caviar no le interesa reducir la desigualdad y la pobreza en el país.
Tenemos que mantener pobre al pobre, con el hueveo que algún día estarán mejor, promesas que nunca cumpliremos. Así siempre estarán de nuestro lado como como cojudos, engañados y como nuestros títeres.
Hablan demasiado pero no ejecutan políticas como:
1. Distribución de la riqueza: Impuestos progresivos, redistribución de la riqueza.
2. Acceso a servicios básicos: Educación, salud, vivienda.
3. Protección social: Programas de asistencia, seguridad social.
4. Derechos laborales: Salarios dignos, condiciones de trabajo justas.
5. Empoderamiento: Participación ciudadana, fortalecimiento de la sociedad civil.
Es cierto que algunas políticas o acciones de los gobiernos de Toledo, Humala, PPK, Vizarra, Sagasti, Castillo o Boluarte, pueden no haber sido efectivas o han sido criticadas por:
1. Ineficiencia burocrática
2. Corrupción
3. Populismo
4. Falta de sostenibilidad económica
5. Excesiva dependencia del Estado
Lo importante es destacar que la lucha contra la pobreza es compleja y requiere un enfoque integral. La izquierda caviar o radical no es homogénea, y existen diferentes corrientes y enfoques. Ejemplo: el gobierno de Alan Garcia logró reducir la pobreza de 50 a 27% en cinco años y mejoró la calidad de vida de sus ciudadanos.
Hay muchos ejemplos de políticas y programas implementados por gobiernos de izquierda en nuestra región que han tenido un impacto positivo en la reducción de la pobreza y la desigualdad y otros no:
1. Programa Bolsa Familia (Brasil, 2003-2019): Transferencias monetarias condicionadas para familias pobres que mantienen a sus hijos en la escuela y reciben atención médica regular. La población en situación de extrema pobreza en Brasil cayó un 40 por ciento en 2023, en comparación con el año anterior, sobre todo en el caso de las mujeres negras (45,2 por ciento), reveló hoy martes el Observatorio Brasileño de las Desigualdades.
2. Revolución Bolivariana (Venezuela, 1999-2013): Programas sociales como la Misión Barrio Adentro (atención médica), la Misión Robinson (educación) y la Misión Mercal (acceso a alimentos). Hoy la pobreza llega al 94.5% de la población, hace cinco años más de 8 millones de venezolanos han huído de su país.
3. Nueva Política Económica (Ecuador, 2007-2017): Inversiones en educación, salud y infraestructura, así como programas de transferencias monetarias condicionadas. En el área urbana la pobreza extrema es de 3,3% y en el área rural es de 23,7%.
4. Programa Oportunidades (México, 2002-2019): Transferencias monetarias condicionadas para familias pobres que mantienen a sus hijos en la escuela y reciben atención médica regular. El 18% de los mexicanos presentan carencia por alimentación digna: Cifras y retos
5. Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (Argentina, 2007-2015): Programas de inclusión social, educación y salud para los sectores más vulnerables. La pobreza alcanza al 48,3% de la población urbana según los cálculos de la Universidad Di Tella. Proyectado al total del país arrojó un fuerte salto en los primeros tres meses del 2024
6. Gobierno de Uruguay (2005-2020): Políticas de redistribución de la riqueza, acceso a servicios básicos y programas de inclusión social. El total de personas bajo la línea de la pobreza en Uruguay fue de 10,4% en el primer semestre, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) del país. Eso significa que 104 de cada 1000 personas no superaron el ingreso mínimo para cubrir las necesidades básicas. En tanto, el 0,2% de la población está bajo la línea de la indigencia.
Estos son solo algunos ejemplos, y cada caso tiene sus particularidades y resultados. Claro, que entiendo los argumentos de algunos que señalan «los programas de asistencia social crean dependencia y perpetúan la pobreza en lugar de abordar sus causas profundas. Ejemplo: en nuestro país los programas como «Vaso de Leche» o «Las Ollas Comunes», son vistos como soluciones temporales, al final no abordan las raíces de la pobreza.
Sin embargo, también es importante considerar el contexto y los objetivos de estos programas. Muchos de ellos buscan:
1. Aliviar la pobreza extrema: Proporcionar una red de seguridad básica para las personas más vulnerables.
2. Apoyar la transición: Ayudar a las personas a superar situaciones de crisis y a encontrar oportunidades para mejorar su situación económica.
3. Fomentar la inclusión social: Proporcionar acceso a servicios básicos y oportunidades para las personas marginadas.
Lo más importante es buscar un equilibrio real entre la asistencia inmediata y el fomento de la autonomía y el desarrollo a largo plazo. Los programas de asistencia social pueden ser más efectivos si se combinan con:
1. Educación y capacitación: Ayudar a las personas a desarrollar habilidades y competencias para mejorar su empleabilidad.
2. Apoyo para el emprendimiento: Fomentar la creación de pequeñas empresas y negocios para generar ingresos sostenibles.
3. Reformas estructurales: Abordar las causas profundas de la pobreza, como la desigualdad económica, la falta de acceso a la educación y la salud, y la discriminación.
Ahora ¿Cómo se pueden diseñar programas de asistencia social para abordar la pobreza de manera efectiva? ATENCION CANDIDATOS A LA PRESIDENCIA 2026 Para diseñar programas de asistencia social efectivos, se deben considerar los siguientes elementos:
1. Análisis de las causas profundas de la pobreza: Identificar los factores que contribuyen a la pobreza en la comunidad.
2. Participación comunitaria: Involucrar a la comunidad en el diseño y la implementación del programa para asegurar que se aborden las necesidades reales.
3. Enfoque integral: Combinar la asistencia inmediata con programas de educación, capacitación y apoyo para el emprendimiento.
4. Flexibilidad y adaptabilidad: Diseñar programas flexibles que puedan adaptarse a las necesidades cambiantes de la comunidad.
5. Evaluación y seguimiento: Establecer mecanismos de evaluación y seguimiento para asegurar que el programa esté logrando sus objetivos.
6. Colaboración con otros sectores: Trabajar con otros sectores, como la educación, la salud y la economía, para abordar la pobreza de manera integral.
7. Fortalecimiento de las redes de apoyo: Fomentar la creación de redes de apoyo comunitarias para ayudar a las personas a superar la pobreza.
8. Innovación y creatividad: Estar dispuestos a probar nuevas estrategias y enfoques para abordar la pobreza.
Al considerar estos elementos, se pueden diseñar programas de asistencia social que no solo alivien la pobreza en el corto plazo, sino que también promuevan el desarrollo sostenible y la inclusión social en el largo plazo.