La estrategia de China para poner a los humanos en Marte y con una «econosfera”

China está estudiando la mejor estrategia para llevar a cabo misiones sostenibles a Marte con el objetivo de mejorar una estancia más larga de los astronautas.

Con la misión Tianwen-1 en Marte desde el 22 de mayo, Wang Xiaojing, presidente de la Academia de Tecnología de Vehículos de Lanzamiento de China (CALT), explicó, en una conferencia de prensa esta semana, el plan del país para tener una presencia humana sostenible en el Planeta Rojo, comenzando con la construcción de una plataforma que permita las primeras misiones tripuladas.

El proceso comienza, anunció, con un puesto de avanzada orbital, luego el estudio del aterrizaje en la superficie del planeta y, finalmente, la construcción de una base en Marte. Durante este proceso, se realiza una evaluación de los recursos naturales del planeta a través de la extracción de agua subterránea de la superficie y la producción de oxígeno.

En la última fase está prevista la formación de la llamada» econosfera», el desarrollo de flotas reutilizables de naves espaciales, depósitos de propulsante para repostar naves espaciales en la órbita de Marte, y el uso de órbitas de ciclo, un concepto presentado previamente por Buzz Aldrin.

En este ambicioso pero temprano Plan de Wang todavía hay muchos aspectos que deben tenerse en cuenta. Según el presidente, CALT, que pertenece al principal contratista espacial de China, la China Aerospace Science and Technology Corporation (CASC) ha llevado a cabo un análisis sobre la arquitectura de la misión: los tiempos de lanzamiento disponibles, los tipos de órbitas que la nave espacial puede utilizar para llegar a Marte y el sistema de propulsión más adecuado para permitir estancias cortas y largas y visitas regulares y repetidas.

En una fase robótica temprana del plan, los cohetes químicos se utilizarán como propulsores, mientras que en las primeras misiones humanas ya se pretende utilizar vehículos de lanzamiento de carga pesada para construir la nave espacial en órbita, agregó. Así, se calcula que será posible realizar los viajes Tierra-Marte utilizando propulsión eléctrica y nuclear térmica, en la que la carga volaría y aterrizaría en Marte por separado, y un Vehículo de descenso y Ascenso a Marte (MDAV) transferiría astronautas hacia y desde la superficie.

Las tecnologías nucleares permitirían así una gran disminución del tamaño de los vehículos de transferencia Tierra-Marte, pero, además de la falta de desarrollo, su uso se ha puesto en tela de juicio debido a los impactos ambientales que puede traer. También se consideraron la propulsión por fusión nuclear y la Tecnología de Ascensores Espaciales, pero todavía requieren avances teóricos y tecnológicos.

Wang también se dio cuenta de que la primera misión tripulada enviada por China a su nueva estación espacial Tianhe partió este jueves, desde el noroeste del país, con tres astronautas a bordo. El cohete Long March 2F partió a la hora programada, 09h22 (02h22 en Lisboa) desde el Centro de Lanzamiento Espacial Jiuquan en el Desierto de Gobi.