Vida y Estilos
Cuatro alimentos que probablemente tenga en casa y que duran para siempre
Según la revista Galileo, en 2015, arqueólogos reportaron que encontraron miel de tres mil años mientras excavaban tumbas en Egipto y que ésta era perfectamente comestible. Y la verdad es que hay varios alimentos que duran (casi) para siempre.
La revista Galileo revela cuatro:
Miel
Su durabilidad se debe a las características únicas de la miel: baja cantidad de agua y alta de azúcar, de modo que las bacterias no se multiplican. Este alimento contiene también una pequeña cantidad de peróxido de hidrógeno, sustancia única que inhibe el crecimiento de los microbios.
El procesamiento de la miel también contribuye a su longevidad, ya que los azúcares son higroscópicos y tienden a hundirse en el agua atmosférica, lo que no es ideal. Sin embargo, durante el proceso y el envasado, el tratamiento térmico no solo elimina el agua, sino que también las tapas herméticas la mantienen fuera, lo que contribuye aún más a su conservación.
Arroz blanco
Según un estudio británico, el arroz en un paquete cerrado puede durar hasta 30 años, sin que se observen diferencias en su textura y sabor tras la cocción del alimento. El secreto del arroz es la atmósfera y la temperatura. Según las encuestas, la temperatura es baja (alrededor de 3.C) y la falta de oxígeno parecen ser importantes para su longevidad.
Chocolate negro
La adición de leche al chocolate puede reducir su longevidad. Sin embargo, el chocolate negro parece durar más. Si se almacena a una temperatura constante, el chocolate puede durar dos años o más, con concentraciones de los compuestos que se unen a los beneficios para la salud que quedan a lo largo de este tiempo.
Azúcar y sal
Estos alimentos extraen agua, así que si las bacterias intentan crecer, simplemente disminuirán. Por eso, por ejemplo, la sal se usa en el jamón o el bacalao. Como alimentos por derecho propio, si la sal y el azúcar se almacenan en un ambiente sin humedad y en recipientes herméticos, éstos prometen durar indefinidamente.