Salud
El virus del murciélago en el laboratorio chino no es de Covid-19, dice científico
Según la directora del laboratorio de Virología de Wuhan en China, los tres tipos de virus encontrados en murciélagos no presentan suficientes similitudes con el nuevo coronavirus o SARS-CoV-2, causante de Covid-19.
«No tenemos nuestro laboratorio tres familias de Virus. Una de ellas tiene una similitud del 96% con el SARS. Sin embargo, su mayor similitud genética con el nuevo coronavirus es sólo del 79,8%», afirmó Wang Yanyi, la directora del laboratorio, al canal estatal chino CGTN.
«Sabemos que todo el genoma del SARS-CoV-2 y sólo un 80% similar al del virus del SARS. Es una diferencia notoria», dijo.
Como explica la revista Galileo, o SARS corresponde a la sigla en inglés para «Severe Acute Respirory Syndrome», o «síndrome respiratorio agudo grave».
El SARS fue identificado por primera vez en febrero de 2003, y su transmisión fue controlada finalmente en julio de ese mismo año. Mientras tanto, el SARS-CoV-2 es el virus detrás de la pandemia actual.
Este fue presentado por el Comité Internacional de taxonomía vírica (ICTV) en febrero de 2020. En otras palabras, el nuevo coronavirus está genéticamente relacionado con el virus del SARS de 2003, ambos pertenecen a la misma familia o cepa, aunque se trate de un microorganismo distinto.
El presidente de los Estados Unidos Donald Trump ya compartió varias veces con la prensa la teoría de que el nuevo coronavirus habría «escapado» del Instituto de Virología de Wuhan. Wang subrayó firmemente que esta hipótesis no es del todo cierta, porque el laboratorio sólo habrá recibido la primera muestra de lo que entonces era un tipo desconocido de neumonía el 30 de diciembre de 2019.
«Después de comprobar el patógeno en esa muestra, descubrimos que contenía un nuevo coronavirus, actualmente conocido como SARS-CoV-2. No teníamos conocimiento de ello anteriormente, ni habíamos encontrado, investigado o mantenido ese virus», argumentó y subrayó la virólogo.
Según Galileo, a pesar de que la ciencia sigue investigando cuál fue el origen del SARS-CoV-2 y cómo se propagó a los seres humanos. Varias investigaciones ya han asegurado que el nuevo virus no es una creación humana y que probablemente haya evolucionado de forma natural.