Opinión
Razón tenía Rousseau dada en su obra «El contrato social»: «Que el hombre nace bueno y la sociedad lo corrompe»
Hace un buen tiempo señale en una nota “sin pelos en la lengua Jauri’ y en pysnnnoticias, que hoy los peruanos vivimos en una sociedad hipócrita que preconiza antes que todo el valor económico; tanto tienes, tanto vales. Todo es demostraciones de lucro, vanidad en la ropa de vestir, licores, celulares, relojes de marcas reconocidas, lugares lujosos donde asistir y por ello, quienes no tienen dinero lo buscan obtener como sea, el vale todo.
Es evidente que las relaciones sociales y las familiares se deterioran cuando no hay dinero de por medio para satisfacer las necesidades suntuarias que inclusive predominan por encima de las necesidades básicas (alimentación, salud y educación), existe marginación o discriminación directa o indirecta entre los jóvenes de la misma edad, sobre todo cuando alguien no cuenta con los signos exteriores de riqueza.
Entre estos jóvenes se producen los antivalores, por ejemplo: honrado no existe nadie honrado, entonces seré deshonesto, de otra manera no se puede obtener riqueza, pobre o rico ¿hombre bueno o malo, soez o respetuoso? Por qué, es mejor ser audaz, la osadía que muestran programas de “TV Basura” como imán; bataclanas y figurettis como valores. Entonces se produce el aprendizaje social o por imitación.
Pregunto ¿En en nuestro país existe políticas de salud mental? No, entonces sugerimos las siguientes:
Aplicación de la psicología preventiva y debe iniciarse esta política con la educación inicial.
La creación de la Ficha Única de Evaluación Psicológica en las Instituciones Educativas, la mismas que previo diagnóstico se realice un tratamiento ante los menores problemas detectados en los escolares.
Está ficha, se conservará y será requisito indispensable para la matrícula en cualquier Institución Educativa o de Nivel Superior, debiendo tenerse un seguimiento permanente y continuo desde el nivel de educación inicial, primaria, secundaria y hasta el nivel superior o aquel al cual acceda el joven.
Campañas de salud mental; para el despistaje de psicopatías, indicadores de ansiedad, depresión, angustia, agresividad incontrolable e impulsividad.
Detectar posibles psicosis larvada, (locura en gestación o por brotar (aparecer) la misma que se dan frente a situaciones límite o intolerables por la persona como es el caso de conflictos, traumas o frustraciones.
Cultura de la crianza y la educación de padres, además de aplicar políticas preventivas para la corrección social de toda conducta desadaptada demostrada por los jóvenes en su comunidad.