Futbol
Final Inédita
El Wanda Metropolitano de Madrid, con una capacidad para 67.829 espectadores, será testigo de una final inesperada para muchos debido que hemos observado una de las Semi Finales más emocionantes de Champions, con dos remontadas históricas.
Barcelona acariciaba la final con un 3 – 0 de ventaja en casa. Pero Liverpool es el rival y Anfield ardía con las tribunas repletas de hinchas flameando sus chalinas rojas. Los dirigidos por el alemán Jürgen Klopp lo sabían, sin contar con Salah y Firmiño, dos principales figuras de Los Reds. Arrancaron la llamada final adelantada con el dominio de balón en todos los sectores, desaparecieron a Messi voceado próximo Balón de Oro; por cierto en varios encuentros decisivos no emerge su liderazgo.
Origi a los 6 minutos encendió la máquina para comprar los boletos a Madrid, Wignaldum a los 53, y tras un centro desde la banda izquierda nuevamente Wijnaldum con un soberbio cabezazo coloca el balón en la red para emparejar la serie. En primera plana un niño mueve las manos en señal de aliento al mismo giro de su grito. Messi coge su barbilla, mira a su alrededor incrédulo, sorprendido. Algo faltaba para sellar la noche. Apareció la avivada de Alexander-Arnold (Luego de recibir la pelota de un Recogebolas entrenado para sorprender y entregar rápido, Oakley Cannonier, juvenil del club), cobró el córner con centro rasante para que Origi la clave al otro palo y corone la hazaña. Liverpool y los Beatles tocaron en los bares.
Similar escena se plasmó en el otro encuentro, con diferentes actores. El Ajax recibía al Tottenham con ventaja de un tanto de visita. Se preparaba El Johan Cruyff Arena para otro festival de toques y buen juego; por cierto se fueron al descanso 2 – 0. En la segunda mitad el brasileño Lucas Moura fue el actor estelar con un hat trick de antología. En el último palpitar del Match acabó con el sueño de los holandeses, obteniendo una cita en la final contra el Liverpool.
Nadie daba un sol por esta final hace un par de meses. Pero esto es fútbol y bien se pronuncia: El deporte más maravilloso del mundo. Lo práctico y la garra se impuso al juego bonito. Los ingleses rugirán en Madrid.