Derivado del cannabis combate la fobia social sin causar adicción

Los médicos de la USP (Universidad de São Paulo) han descubierto que un compuesto derivado de la marihuana, el cannabidiol, es eficaz en el tratamiento de la fobia social.

La fobia social, o trastorno de ansiedad social (TEA), es un tipo de trastorno conductual altamente incapacitante caracterizado por ansiedad excesiva ante situaciones de interacción con otras personas.

Es necesario revisar los diagnósticos sobre la fobia social

Mateus Bergamaschi, Regina Queiroz y José Alexandre Crippa han demostrado que la sustancia extraída de la marihuana tiene un efecto ansiolítico, sin causar dependencia, especialmente reduciendo el miedo a hablar en público en personas que tienen fobia social.

El estudio consistió en comparar dos grupos de voluntarios con fobia social, uno de ellos recibiendo una dosis (600 mg) de la sustancia cannabidiol, mientras que el otro grupo recibió un placebo.

Después de dos horas, los participantes de ambos grupos tuvieron que preparar un discurso, de cuatro minutos, para ser leído frente a una cámara en el momento en que vieron su propia imagen en la televisión.

Se observó que el rendimiento de las personas que recibieron cannabidiol fue superior, presentando menor ansiedad y mostrando más confianza. «Tenían un nivel más bajo de ansiedad en comparación con aquellos que recibieron placebo solo», informa Mateus.

El uso del compuesto fue seguro y bien tolerado. Sin embargo, todavía necesita ser aprobado por los organismos reguladores nacionales e internacionales antes de que pueda aplicarse en pacientes.

Trastorno de Ansiedad Social

El trastorno de Ansiedad Social, comúnmente llamado fobia social, es un trastorno caracterizado por manifestaciones de miedo, tensión nerviosa, alarma y malestar desencadenado durante la exposición social. Se manifiesta cuando el portador necesita interactuar con otras personas, realizar tareas bajo observación o participar en actividades sociales.

Las personas afectadas por esta patología reconocen que sus miedos son excesivos e irracionales, pero no pueden evitar las sensaciones y buscan, en todos los sentidos, experimentar situaciones sociales en las que tienen que exponerse.

Las personas con ansiedad social están demasiado preocupadas por el juicio de los demás, con la opinión de los demás sobre ellos, son perfeccionistas y determinadas.

Este aislamiento y timidez se vuelven patológicos cuando, por ejemplo, la persona sufre alguna lesión personal, como no completar un curso, una universidad o una entrevista debido a un examen final porque hay una necesidad de exposición pública ante un evaluador.

El tratamiento actual consiste en cuidados psicoterapéuticos y medicamentosos. Sin embargo, los medicamentos tienen un efecto duradero, pueden tomar 20 días para comenzar a actuar, son caros y pueden conducir a la adicción.

Por lo tanto, los resultados encontrados en la investigación pueden apoyar el desarrollo de un nuevo tratamiento alternativo para estas personas.