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Presidente Castillo quiso lavarse la cara
Por qué, Pedro Castillo respalda a jefe de la policía y no al ministro del Interior???
Después de la masacre y vergonzoso papelón en la entrevista con CNN, el Presidente Castillo quiso lavarse la cara y habló con la premiar Vásquez sobre sobre el derrame de petróleo, también sobre la crisis del ministerio del Interior. Mirtha Vásquez le insistió, como ya lo había expresado en público, en la necesidad de respaldar con firmeza al ministro Avelino Guillén. Que Javier Gallardo, el hasta hoy comandante general de la PNP, tenía que irse a su casa.
El presidente, dijo que se había percatado que “estaban maltratando al doctor Guillén” y que iba a resolver el asunto. Para ello había citado, dijo, al ministro Guillén para conversar esa noche.
Nunca hubo esa reunión ni conversación, menos citación alguna. Tampoco lo llamó o contactó el día siguiente. El «aprendiz de presidente», Castillo, agarró al ministro Guillen de cholito.
«A pesar que cumplió las órdenes de colocar prefectos y subprefectos a gente del CONARE y MOVADEF, adicional ascendió al grado de General PNP a un grupo de coroneles leales al gobierno comunista».
Avelino Guillen, desbarató a la DIVIAC y se fue, misión cumplida! Maraví legalizó el sindicato de terrucos y se fue, Barranzuela ayudó a escapar a «los dinámicos del centro» y se fue, Ayala descabezó a las FFAA y se fue. Y el Congreso a paso de tortuga?
Cada uno llega, cumple una función específica y después ya no importa si los sacan o renuncian. Sin querer, queriendo están copando las instituciones del Estado con proterrucos, pagando favores a quienes ayudaron en campaña.
El exministro Guillen quiso evitar ir al parlamento a quedar en ridículo y salvar su honor como ex fiscal acusador de Fujimori, sabía que los congresistas lo iban a destrozar por su incapacidad, idealismo caviar, sobón, arrastrado por la hoz y el martillo.
Ante ello, sólo le quedó presentar su renuncia por dignidad al cargo de ministro del Interior. La renuncia se produce tras la polémica en torno al retiro del jefe de la Policía Nacional, sin tener el respaldo del presidente Pedro Castillo, qué aún no ha aceptado su salida al cargo.